top of page

Cómo Trabajar La Tolerancia y La Frustración

  • Por Cuentos para crecer.
  • 12 ene 2017
  • 2 Min. de lectura

Aprender a tolerar la frustración desde pequeños permite que los niños puedan enfrentarse de forma positiva a las distintas situaciones que se les presentarán en la vida.

La frustración es una vivencia emocional que se presenta cuando un deseo, un proyecto, una ilusión o una necesidad no se llega a satisfacer o a cumplir.

Cuando un deseo o una ilusión no se cumplen, a causa de la frustración, los adultos -y también los niños- experimentan en mayor o menor medida una serie de emociones como el enfado, la tristeza, la angustia, la ansiedad, etc.

Tolerar la frustración significa ser capaz de afrontar los problemas y limitaciones que nos encontramos a lo largo de la vida, a pesar de las molestias o incomodidades que puedan causarnos. Por lo tanto, se trata de una actitud y, como tal, puede trabajarse y desarrollarse (Fuente: FAROS, HSJD).



Una manera excelente de reflexionar conjuntamente es usando los cuentos como herramienta. Compartimos algunos cuentos buenísimos para trabajar la frustración.

1. La cola del dragón. Mireia Canals

2. ¡Qué rabia de juego! Meritxell Martí

3. Sofía la vaca que amaba la música. Geoffroy de Pennart

4. El león que no sabía escribir. Martin Baltscheit

5. La vieja en la botella. Roberto Mezquita

  • Descripción

Una bruja pelirroja, harta de las quejas de su vecina, decide un día lanzarle un terrible conjuro y encerrarla en una botella:

Tris-trás, ya no quiero verte más.

Tris-trás, te irás y no volverás.

Por suerte, un hada del bosque libera a la vieja de su encierro y cumple su deseo: vivir en una casita con huerta, vacas y gallinas; pero pronto la desagradecida mujer no estará contenta y aspirará a una vida mejor.

La vieja en la botella trata de cómo los deseos pueden ser un acicate para cambiar y progresar; pero también nos interpela sobre la manera de gestionarlos y alerta de las consecuencias de la insatisfacción ante lo material y de la ambición desmesurada.

Con frecuencia, queremos algo más y nos sentimos incapaces de valorar lo que tenemos en el momento presente. Por esta incapacidad, la vieja disfruta brevemente de los sueños cumplidos y cae de nuevo en la frustración y en la queja. No importa cuantos deseos se le concedan: ella es incapaz de disfrutarlos. Al final, quedará atrapada en uno de ellos.



תגובות


Te Gustó
Recuerda Compartir en Facebook
Ideas Destacadas
Síguenos
  • Facebook Classic
  • Twitter Classic

PERSONAL COACH - FITNESS - NUTRICION PERSONALIZADA - PERDIDA DE PESO - MUSCULACION - TONIFICACION - SPA FACIAL

bottom of page